Publicada el: lunes, 9 marzo 2020 | Escrito por Sandra Fernández
La Unidad de Rehabilitación Cardíaca dependiente, de los Servicios de Cardiología y Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Universitario Virgen Macarena, puso en marcha a mediados del 2018 un programa de rehabilitación cardíaca destinado exclusivamente a pacientes con insuficiencia cardíaca. “Estos pacientes son frágiles y están muy limitados para el ejercicio físico debido a su enfermedad cardíaca, con una tendencia a la arritmia superior al resto de pacientes cardíacos”, asegura la responsable de la Unidad, la doctora M.ª Mar Martínez Quesada.
Los pacientes candidatos a realizar esta terapia proceden mayoritariamente de las consultas de la Unidad de Insuficiencia Cardíaca. El objetivo de este programa es que el paciente sea capaz de realizar actividades de la vida diaria sin fatiga ni sensación de ahogo. Los pacientes acuden a las sesiones de entrenamiento a las instalaciones de la Unidad de Rehabilitación Cardíaca durante dos meses, controlados por profesionales de enfermería, fisioterapia, cardiología y rehabilitación.
Antes de iniciar el programa, se les realiza una prueba de esfuerzo con consumo de oxígeno. En esta prueba se valora funcionamiento del corazón y la ventilación pulmonar y permite cuantificar el grado de limitación del paciente. Se programa el ejercicio en función de las pulsaciones que alcanza en esta prueba.
El programa de entrenamiento incluye: ejercicio aeróbico en bicicleta o cinta, el entrenamiento de fuerza con pesas, y entrenamiento de la musculatura inspiratoria. Para el entrenamiento de fuerza se calcula la resistencia muscular del paciente, y se trabaja por debajo de ésta para aumentar la masa muscular. Por último, se mejora la capacidad de inspirar mediante un dispositivo en el que el paciente tiene que “soplar” cada vez con más fuerza. Además, durante el tiempo que están acudiendo a la unidad, se ajusta el tratamiento con medicamentos y se les explica cómo llevar una alimentación saludable.
“Aunque hace unos años se contraindicaba estos programas por la salud quebradiza de estos pacientes, poco a poco se ha comprobado que si se realizan de forma lenta y progresiva mejora la capacidad funcional y la calidad de vida”, explica la especialista Martínez Quesada. “Se trata de pacientes que con anterioridad a esta rehabilitación, eran incapaces de desplazarse desde su casa a cualquier lugar cercano a la misma”, añade.
Hasta la fecha, la Unidad de Rehabilitación Cardíaca del Hospital ha ofrecido terapia rehabilitadora a 47 pacientes. La edad media ronda los 59 años, aunque oscila de 38 a 77 años. La principal causa de cardiopatía es la enfermedad coronaria o cardiopatía isquémica. El 90% son varones y el 67% diabéticos. En todos se observa un mejoría de la calidad de vida y capacidad de hacer esfuerzos. Y además, no se han producido complicaciones importantes durante los entrenamientos de estos pacientes. Gracias al trabajo de estos profesionales, estas personas pueden llevar una vida más parecida a la que llevaban antes de enfermar.
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