Publicada el: viernes, 9 noviembre 2018 | Escrito por Sandra Fernández
Entre los días 8 y 10 de este mes se celebra en Sevilla el 28 Congreso de la Sociedad Andaluza de Hipertensión Arterial y Riesgo Vascular (SAHTA), en cuyo seno la Unidad de gestión clínica de Medicina Interna tiene una amplia participación a través de la Unidad de Riesgo Vascular, tanto a nivel del comité científico y organizador, como en numerosas mesas y comunicaciones de dicho Congreso.
Los especialistas de la Unidad de Riesgo Vascular darán a conocer en este foro y a través de diversas mesas temáticas, un grupo de ponencias que versaran sobre:
Mesa ‘Técnicas en Riesgo Vascular’.:Ponencias: ‘Pie diabético. ITB y monofilamento’ del dr. Miguel Ángel Rico y ‘Ecografía en Riesgo Vascular’ expuesta por el dr. Luis Castilla.
-Mesa Hígado graso y riesgo cardiovascular:Ponencia: ‘Mi paciente tiene hígado graso¿y ahora que?’.dr Luis Castilla
-Mesa Actualización en nuevas estrategias de insulinización Ponencia: ‘Importancia del control glucémico en el Hospital’ a cargo del dr. Miguel Ángel Rico
-Mesa Insuficiencia cardíaca. Experiencia en la vida real
Ponencia: ‘Tratamiento de insuficiencia cardíaca en situaciones especiales’ a cargo del dr. José Salvador Alegre –
-Mesa conjunta con Farmacia: Se nos olvida el riesgo cardiovascular en otras entidades clínicasPonencia: ‘Enfermedades minoritarias por defecto enzimático lisosomal y Riesgo Cardiovascular’ a cargo de José Antonio Pérez de León
COMUNICACIONES ORALES
-Efecto de imidapril sobre la proteinuria y el grosor íntima-media carotideo en pacientes hipertensos. Estudio comparativo con losartan.-Pronóstico de la isquemia arterial crítica de miembros inferiores.-Enfermedad arterial periférica vs ictus isquémico, ¿mismos factores de riesgo?.PÓSTERS-Isquemia arterial crítica de miembros inferiores en los muy ancianos: ¿Es una enfermedad diferente?
-Hiperlipoproteinemia (a): ¿Está justificado el tratamiento específico en pacientes con alto riesgo isquémico?-Varón de 45 años con trombosis bilateral de miembros inferiores: la culpa fue del retroperitoneo